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sábado, 24 de marzo de 2007

Otra para reflexionar

Para reflexionar: Mientras el Sacerdote recorría la Iglesia a mediodía... al pasar por el Altar, decidió quedarse cerca para ver quien venia a rezar. En ese momento se abrió la puerta y vio entrar a un hombre yAcercarse por el pasillo. El hombre estaba sin afeitarse desde hacia varios días, su camisa estaba rota y los bordes de su desgastado abrigo se habían comenzado a deshilachar. El hombre se arrodillofrente al Altar, inclinó la cabeza, luego se levantó y se fue. Durante los días siguientes, el mismo hombre, siempre al mediodía, entraba a la Iglesia cargando una maleta... se arrodillababrevemente y luego volvía a salir. El sacerdote, un poco temeroso, empezó a sospechar que se tratase de un ladrón, por lo que un día se puso en la puerta de la Iglesia y, cuando el hombre se disponía a salir le preguntó:"¿Qué haces aquí?". El hombre le dijo que trabajaba cerca y tenia media hora libre para el almuerzo y aprovechaba ese momento para rezar, "Sólo me quedo unos instantes, sabe, porque la fábrica queda un poco lejos, así que solo me arrodillo y digo: 'Señor, solo vine nuevamente para contarte cuan feliz me haces cuando me liberas de mis pecados... no se muy bien rezar, pero pienso en Ti todos los días... Así que Dios, este es Juan reportándose". El Padre, sintiéndose un tonto, le dijo a Juan que estaba bien y que era bienvenido a la Iglesia cuando quisiera. Luego se arrodillo ante el Altar, sintió derretirse su corazón con el gran calor del amor y encontró a Dios. Mientras las lágrimas corrían por sus mejillas, en su corazón repetía la plegaria de Juan: SOLO VINE PARA DECIRTE, SENOR, CUAN FELIZ FUI DESDE QUE TE ENCONTRÉ A TRAVES DEMIS SEMEJANTES Y ME LIBERASTE DE MIS PECADOS... NO SE MUY BIEN COMOREZAR, PERO PIENSO EN TI TODOS LOS DIAS... ASI QUE DIOS, SOY YO REPORTÁNDOME". Cierto DIA el sacerdote notó que el viejo Juan no había venido. Siguieron pasando los días sin que Juan volviese para rezar. Como continuara ausente, el Padre se empezo a preocupar, hastaque finalmente fue a la fabrica a preguntar por el. Alli le dijeron que Juan estaba enfermo y que, pese a que los médicos estaban muy preocupados por su estado, todavía creían que tenía una posibilidadde sobrevivir. La semana que Juan estuvo en el hospital trajo muchos cambios: el sonreía todo el tiempo y su alegría era contagiosa. La enfermera Jefe no podía entender por que Juan estaba tan feliz, ya que nunca había recibido ni flores, ni tarjetas, ni visitas. El sacerdote se acerco al lecho de Juan con la enfermera y esta le comento, mientras Juan escuchaba: "Ningún amigo ha venido avisitarlo; el no tiene a donde recurrir". Sorprendido, el viejo Juan dijo con una sonrisa: La enfermera esta equivocada... pero claro, ella no puede saber que TODOS LOS DIAS, desde que llegue aquí, aMEDIODIA, un querido amigo mío viene, se sienta aquí en la cama, me agarra de las manos, se inclina sobre mi y me dice: "SOLO VINE PARA DECIRTE, JUAN, CUAN FELIZ FUI DESDE QUE ENCONTRE TU AMISTAD Y TE LIBERE DE TUS PECADOS. SIEMPRE ME GUSTO OIR TUS PLEGARIAS, PIENSO EN TI CADA DIA... ASI QUE JUAN, ESTE ES TU DIOS REPORTANDOSE". P.S.: Ahora, cada DIA, no podemos perder la oportunidad de decirle a Dios:"Aquí estoy REPORTANDOME...."

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